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Beneficios de la granada

Beneficios de la granada

La granada es una fruta del otoño de sabor dulce y muy sabroso que cuenta con muchos nutrientes, entre los que destacan los antioxidantes, la fibra, vitamina C, E y A y minerales como el potasio, el magnesio, el calcio o el hierro. Todas estas sustancias hacen que esta fruta de intenso color ayude al correcto funcionamiento del organismo y a prevenir enfermedades.

Índice

¿Qué beneficios para la salud aporta el consumo de granadas?

La mayor parte de los beneficios de la granada se deben a su riqueza en compuestos antioxidantes que tienen propiedades anticancerígenas y antiinflamatorias, por lo que ayuda a prevenir el desarrollo de enfermedades muy graves como el cáncer, la diabetes o las enfermedades cardiovasculares.

También contiene vitamina C, vitamina A, potasio, magnesio, ácido fólico, taninos, ácido málico, ácidos grasos insaturados como el omega 5, compuestos fenólicos y algunos alcaloides (triterpenos, esteroles, polifenoles y flavonoles) por eso son muchos los beneficios que nos ofrece esta fruta:

1- Ayuda a prevenir el cáncer

Como decíamos, la granada cuenta con muchos antioxidantes, entre los que destacan los taninos, que han demostrado, en numerosos estudios, tener propiedades anticancerígenas al reducir la división celular e inducir la muerte de las células tumorales (apoptosis). Un estudio de la Universidad del Sur de Taiwán de Ciencia y Tecnología mostró que el jugo de granada era especialmente eficaz para luchar contra una célula del cáncer de próstata, mientras que otro de la Universidad de Florida Atlantic encontró resultados similares con respecto a las células del cáncer de mama.

2- Evita la diabetes

La granada es rica en polifenoles, una sustancia antiinflamatoria que disminuye el riesgo de sufrir enfermedades metabólicas como la diabetes. Asimismo, el jugo de la granada tiene propiedades hipoglucemiantes, es decir, ayuda a controlar los niveles de glucosa en la sangre.

3- Previene la obesidad

La granada ayuda a controlar la grasa corporal del organismo y evita su exceso, por lo que ayuda a luchar contra la obesidad y a mantener el peso. Además, su bajo contenido en calorías y su alto porcentaje de agua hace que sea ideal en dietas de adelgazamiento.

4- Estimula el sistema inmunológico

El zumo de granada concentra los beneficios de las semillas de granada, ricas en tres tipos diferentes de antioxidantes: taninos, antocianinas y ácido elágico. Estos antioxidantes ayudan a luchar contra los radicales libres y a mantener las células sanas de nuestro organismo, por lo que ayuda n a combatir contra los virus, evitando el desarrollo de enfermedades y manteniendo nuestros órganos sanos.

5- Mantiene la presión arterial baja

Los antioxidantes de las granadas contribuyen a mantener las arterias libres de placa, lo que mantiene la tensión arterial controlada y evita el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares y arterioesclerosis. Estudios realizados en la Facultad de Medicina en Valladolid demuestran que el zumo de granada y los extractos de semilla tienen hasta tres veces más capacidad antioxidante que cualquier vino tinto.

6- Reduce el colesterol

Los polifenoles ayudan a reducir el colesterol malo de las arterias y mantener elevado el bueno, lo que ayuda también a la salud de las arterias, evitando el desarrollo de enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares.

7- Combate la inflamación

Los antioxidantes tienen un gran efecto antiinflamatorio, por lo que ayudan a reducir la inflamación en casos de artritis, artritis reumatoide u osteoartritis. También ayudan a reducir el dolor y minimizar la degradación del cartílago.

8- Combate el envejecimiento

Su enorme poder antioxidante disminuye el estrés oxidativo de las células, protegiéndonos contra los efectos del envejecimiento celular y la oxidación. 

9- Mantiene la piel saludable

Tanto ingerida, como en mascarilla, las vitaminas, minerales y antioxidantes de la granada ayudan a mantener la piel sana y joven, oxigenando las células. Además, su contenido en hierro promueve la renovación de los tejidos y el zumo de granada prolonga la vida de los fibroblastos, encargados de mantener la piel firme y elástica. Por otra parte, los betacarotenos inhiben el daño oxidativo causado por los radicales libres y previenen la aparición de arrugas o manchas. También protege la piel de los rayos ultravioleta.

10- Combate las enfermedades respiratorias

Su vitamina C y sus propiedades antiinflamatorias ayudan a tratar enfermedades respiratorias como el asma, la bronquitis, la gripe o el resfriado. Si estás mala, come granadas.

11- Depura los riñones

Las semillas de granada ayudan a la depuración renal y a equilibrar los líquidos del organismo, manteniendo el equilibrio hidrosalino y previniendo la deshidratación. Asimismo, sus antioxidantes ayudan a expulsar el exceso de sales y toxinas a través de la orina.

12- Regula la microbiota

Ayuda a equilibrar y regular la microbiota intestinal, protegiéndonos frente a enfermedades y evitando trastornos digestivos. 

13- Mejora la salud ósea

Estudios en animales han demostrado que evita la pérdida de masa ósea. 

¿Cómo consumir la granada?

Se recomienda consumirla en su estación, es decir, el otoño. Su sabor entre ácido y dulce la convierten en un complemento perfecto tanto para platos dulces como salados. Puedes tomarla de postre con un chorrito de limón o mezclarla con tus ensaladas (es muy popular en Navidad con escarola, pero existen muchas opciones). También sirve para salsas, acompañar carnes rojas, macedonias, tartas, bizcochos, etc.

Fuente:

The Journal of Nutritional Biochemistry, Volume 16, Issue 6, June 2005, Pages 360-367;

Redacción: Irene García

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