Beneficios de no comer carne
Hace unos años saltó la alarma tras un informe de la OMS (Organización Mundial de la Salud) en el que se relacionaba el consumo de carnes procesadas con el cáncer. Incluso se hablaba de que la carne roja podía no ser buena para la salud. Por eso, consumir poca carne o incluso dejar de comer carnes rojas puede ser bueno, siempre que sustituyamos los nutrientes que estos alimentos nos aportan por otros iguales.
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¿Es realmente malo comer carne?
En muchos países, el consumo de carne es excesivo y está demostrado que, aunque la carne es necesaria para una buena salud en su justa medida, un consumo excesivo de ciertas carnes, sobre todo rojas y procesadas, puede ser muy perjudicial. Por eso, la OMS recomienda evitar el consumo de carnes procesadas, limitar el de carne roja e incluso pasar algún día a la semana sin comer nada de carne, ni blanca ni de ningún tipo.
Y es que diversos estudios que se han hecho en los últimos años confirman que comer carnes (especialmente rojas procesadas) incrementa el riesgo de contraer enfermedades tan graves como obesidad, diabetes o cáncer. Por eso, debemos empezar a limitar el consumo de carne en nuestra dieta y potenciar el de alimentos más sanos como las frutas, las verduras, las legumbres, los granos o los cereales integrales.
Para mejorar nuestra salud, primero debemos tener claro qué son las carnes procesadas. Según la OMS, la carne procesada es "cualquier tipo de carne que ha sido transformada con salazón, curado, fermentación, ahumado u otros procesos para mejorar el sabor y preservar el alimento". Por ejemplo, salchichas, carne picada, embutidos o beicon. En cuanto a la carne roja, es toda aquella carne que presenta un color rojo o rosado en estado crudo (carne de vaca, de caza, etc.). Y, por último, la carne blanca, que es la más saludable, es toda aquella carne que, en estado crudo, presenta un color blanquecino o rosa claro, como las carnes de aves o algunos cortes de la carne de cerdo. Por lo tanto, la carne que debemos limitar sobre todo es la carne procesada.
Pero, además de relacionarse con algunos tipos de cáncer como el colorrectal, el gastrointestinal o el cáncer de mama, comer menos carne aporta otros beneficios a nuestra salud:
1- Perderás peso
Según un estudio publicado en la revista Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics, las personas que no comen carne tienen un Índice de Masa Corporal medio menor que los que consumen carne y, por lo tanto, también una tasa más baja de obesidad. Y es que las carnes, especialmente las rojas, tienen un alto nivel de grasas saturadas, que son las que más se acumulan en el organismo causando sobrepeso. Por eso, si dejas de comer carne, sobre todo hamburguesas, salchichas, beicon y demás, seguro que adelgazas más rápido.
2- Evitarás el desarrollo de enfermedades cardiovasculares
Como decíamos, algunos tipos de carnes, especialmente las procesadas, contienen un alto nivel de grasas saturadas, y este tipo de grasas son uno de los principales responsables en aumentar los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre, lo cual aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.
Además, las personas que consumen menos carne suelen tener niveles de presión arterial más bajos, lo cual también ayuda a evitar estas enfermedades y tener una mejor salud.
3- Reducirás el riesgo de desarrollar diabetes
La diabetes es una enfermedad metabólica que ha aumentado en los últimos años debido a la mala alimentación y al exceso de consumo de azúcares y grasas. Un estudio realizado por la Asociación Americana de Diabetes ha descubierto que las personas que no comen carne tienen menos riesgo de síndrome metabólico, ligado al desarrollo de diabetes tipo 2 y accidentes cerebrovasculares.
4- Tus digestiones mejorarán
Si sustituyes la carne por otros alimentos con proteínas como las legumbres o las verduras, aumentará tu consumo de fibra, la cual favorece el tránsito intestinal y evita el desarrollo del estreñimiento, un problema muy habitual actualmente, además de otros problemas digestivos como la hinchazón o las digestiones pesadas.
Asimismo, no comer carne genera buenas bacterias en el estómago, como los probióticos, que protegen el intestino.
5- Ligarás más
Según una investigación realizada en la Universidad de Macquarie (Australia), las mujeres prefieren el olor de los hombres que consumen grandes cantidades de frutas y verduras, así que si consumes menos carne y más frutas y verduras, olerás mejor para el sexo opuesto y puede que consigas más citas.
6- Tu piel estará más bonita
Las grasas saturadas aumentan la grasa de la piel, lo que puede aumentar problemas como el acné. Por el contrario, las frutas y las verduras contienen muchos antioxidantes que neutralizan los radicales libres, principales causantes del envejecimiento de la piel, las arrugas y las manchas.
Entonces ¿no debo comer carne?
La OMS no indica que haya que dejar de consumir carne totalmente, solo que hay que limitar el consumo de carnes procesadas y rojas, pero no dice nada de las carnes blancas. Hay que tener en cuenta que la carne también aporta a nuestro organismo nutrientes esenciales que son difíciles de conseguir de otras fuentes, como el hierro o la vitamina B12. Por lo tanto, si decides eliminar totalmente la carne de tu dieta deberás incluir en la misma alimentos que te aporten estos nutrientes, como el pescado o los huevos.
De hecho, la dieta mediterránea es una de las más saludables y está demostrado que reduce la incidencia de enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, depresión o cáncer. En lo que respecta a la carne, no la elimina por completo, pero es muy restrictiva con respecto a las carnes rojas y procesadas.
Los principios de la dieta mediterránea sobre la carne incluyen:
- No comer carne, ni blanca ni roja, un día a la semana
- Consumir preferentemente carne blanca o de ave (dos o tres veces por semana)
- Consumir carne roja de manera ocasional (un par de veces al mes)
- Limitar mucho el consumo de carne procesada
