¿Cómo saber si se tiene obesidad?

Índice

• ¿Cómo saber si se padece obesidad?
• ¿Cuándo se le considera obeso a un adulto?
• ¿Qué es la obesidad mórbida? ¿Cuáles son sus causas?

Lo cierto es que hay muchas razones por las que algunas personas tienen dificultad para evitar una enfermedad como es la obesidad. Esta, además, es el resultado de una combinación de factores hereditarios con el entorno, la dieta personal y las opciones de ejercicio. Aunque si algo se puede sacar a colación es que incluso una modesta pérdida de peso ya podría mejorar algo o al menos prevenir algunos problemas de salud relacionados con la obesidad. Ten en cuenta, por tanto, que los cambios en la dieta, un mayor nivel de actividad física y los cambios de conducta podrían ayudarte a bajar de peso.

¿Cómo saber si se padece obesidad?

Pues bien, la obesidad se diagnostica cuando el Índice de Masa Corporal (IMC) sea igual o mayor a 30 y para determinar, por tanto, si tu índice de masa es o no elevado y superior a esa cifra deberás dividir tu peso en kilogramos por la altura al cuadrado, o lo que es lo mismo: IMC= peso (kg) entre estatura (m2). No obstante, hay algunos síntomas muy comunes en medicina como:

- dificultad para dormir

- dolor de espalda y/o en las articulaciones

- sudoración excesiva

- intolerancia al calor

- infecciones en los pliegues cutáneos

- fatiga

- depresión

- sensación de falta de aire (disnea)

¿Cuándo se le considera obeso a un adulto?

Los adultos con un IMC de 30 a 39.9 se consideran obesos. Además, los adultos con un IMC superior o igual a 40 se consideran extremadamente obesos. Y, finalmente, cuando una persona está en 45 o por encima de 45 de sobrepeso es que sufre obesidad mórbida.

¿Qué es la obesidad mórbida? ¿Cuáles son sus causas?

Sufrir obesidad mórbida supone que tenemos 45 kilos más sobre nuestro peso ideal, un tipo de obesidad que supone un riesgo para la salud al tener mucho tejido adiposo. Además, esta se corresponde con un exceso de peso de más de 45,5 kilos por encima de nuestro peso adecuado.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad es un problema grave de salud y se define como una acumulación excesiva de grasa y, aunque si bien es cierto que el paso de una persona con un peso normal a una persona obesa se achaca siempre a un aumento excesivo de la ingesta de calorías, hay otras muchas razones por las que una persona podría acabar sufriendo esta enfermedad:

- factores genéticos: se ha observado en varios estudios una predisposición familiar a padecer obesidad, ya que aunque tiene mucho que ver con los hábitos de vida, según los especialistas hay una clara asociación entre obesidad y genética.

- factores ambientales: el entorno de una persona también puede tener un impacto definitivo en el riesgo de desarrollar esta enfermedad, como son, el tipo y la cantidad de alimentos que se tienen al alcance, la disponibilidad de realizar ejercicio físico, y una dieta y hábitos de vida de todas aquellas personas que son parte del entorno más inmediato del paciente obeso.

- factores psicológicos: el estrés, la ansiedad, los estados depresivos y traumáticos y también una baja autoestima son factores psicológicos que podrían desencadenar perfectamente un comportamiento compulsivo de la persona a la hora de comer.

No obstante, si tienes algunos de los síntomas anteriormente mencionados o crees que algunos de estos tres factores pudieran estar influyéndote hablar con tu médico. Recuerda que si te preocupan los problemas de salud relacionados con el peso debes preguntar siempre a tu médico sobre el control de la obesidad. Será él la única (y mejor) persona que pueda ayudarte en este tema y evaluar así los riesgos para tu salud analizando también todas las opciones existentes para bajar de peso: medicamentos, dieta, ejercicio físico o incluso cirugía bariátrica.