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¿Cómo saber si retengo líquidos?

¿Cómo saber si retengo líquidos?

A la hora de controlar el peso probablemente uno de los problemas que más nos importa es el de la retención de líquidos, un proceso que sucede en muchas personas y sus causas, además, suelen ser bastante variadas.

Índice

¿Qué es la retención de líquidos?

Probablemente, de hecho, ya hayan sido varias las veces que hemos aumentado de peso sin darnos apenas cuenta e, incluso, en otras ocasiones, nos haya resultado bastante complicado lograr quitarnos algunos kilitos que creemos que nos sobran. ¿Esto por qué sucede? Por la retención de líquidos…

La retención de líquidos o edema es, tal y como definen desde la Fundación Española del Corazón, la acumulación excesiva de líquido en los tejidos corporales y, además, una afección patológica que derivaría de un mal funcionamiento orgánico. La retención de líquidos se debe principalmente a problemas circulatorios o a una insuficiencia cardiaca congestiva, pero también podría ser debida a un mal funcionamiento hepático o renal.

Además, al no proceder de una patología, hemos de ser conscientes de que algunas de las principales causas que provocan esta retención de líquidos serían la dilatación de las venas en las épocas en las que las temperaturas aumentan y una alimentación inadecuada. Pero ¿cómo sé yo si retengo líquidos? Lo cierto es que existen una serie de síntomas que podrían indicarnos perfectamente si estamos o no reteniendo líquidos.

En primer lugar, lo que podremos comenzar a notar será un aumento paulatino de peso sin motivo aparente y sin hacer nada fuera de lo normal para que esto se produzca. Además, notaremos cómo las piernas y los tobillos se nos hinchan, y cómo disminuirá nuestra micción, que es otro de los síntomas de la retención de líquidos. Y sí, aunque normalmente los procesos que suelen ser más severos aparecen a edades mucho más avanzadas, hoy en día cada vez más personas jóvenes la padecen debido principalmente a las causas anteriormente mencionadas o a la mala alimentación y al sedentarismo. Solo en ocasiones especiales es señal de una enfermedad más grave como el cáncer. Por eso, conviene consultar a un profesional de medicina. 

Otros de los síntomas principales

- Tus piernas y tus pies están hinchadas, las notas cansadas o pesadas.

- Cada vez vas menos al baño y, a pesar de estar hidratándote, tardas bastante en acudir al baño a orinar.

- Notas calambres o una especie de adormecimiento en tus piernas o en tus pies.

- Por más que haces dietas tu peso es siempre el mismo.

- Y, finalmente, si no has sido nunca de tener ojeras, y últimamente lo único que haces es verlas y, además, se han hinchado tanto que han provocado bolsas en tus ojos…probablemente estés reteniendo líquidos. ¿Quieres prevenirlo?

¿Qué hacer para prevenir la retención de líquidos?

Probablemente uno de los mejores remedios para disminuir la retención de líquidos sea reducir el consumo de sodio o sal. ¿Por qué? Pues bien, porque los alimentos, por norma general, contienen sales minerales en su composición por lo que no resulta necesario añadir más. Realizar actividad física y, en definitiva, hacer cualquier actividad deportiva que nos agrade y nos motive un poco sería bueno también para prevenirla. Dejar de lado la ropa ajustada siempre es buena opción ya que ir con ropa demasiado apretada evita la correcta circulación sanguínea. Y, sobre todo, beber agua y otros líquidos (aunque mejor agua…). De hecho, al beber estamos facilitando la actividad renal de nuestro organismo y a eliminar líquidos de manera mucho más sencilla. Pero también es importante controlar que no tenga demasiado sodio.

En cuanto a la alimentación y un modo de vida saludable lo mejor será incluir alimentos ricos en potasio en la dieta para controlar aún más la pérdida de líquidos. Recuerda, por ejemplo, que, además de que muchas frutas y verduras contienen este mineral, sobre todo es el plátano la fruta que más cantidad de potasio contiene. Beber demasiado alcohol tampoco es bueno. De hecho, lo mejor será evitarlo, pero también el tabaco. Ambos hábitos tan nocivos para nuestra salud son bastante perjudiciales para el correcto funcionamiento del aparato circulatorio, y también de los riñones y del hígado.

Estás embarazada y retienes líquidos… ¿cómo actuar?

Es cierto que la hinchazón es normal durante el embarazo debido principalmente a los cambios hormonales que ocurren en esta etapa de la gestación y, aunque pudiendo ocurrir en cualquier momento del embarazo, por norma general si padeces retención de líquidos lo harás en el segundo trimestre o al final del tercero que es, además, cuando la mujer suele sentirse mucho más cansada y tiene menos disposición para caminar o practicar actividad física.

Si esto te sucede lo mejor que puedes hacer es utilizar medias elásticas en las piernas y también en los pies, que además debes colocar antes de levantarte de la cama. También sería recomendable que redujeras la ingesta de sal y de productos industrializados ricos en sodio, que tomes abundante agua y algunos tipos de té que a su vez ayudan a combatir la infección urinaria, muy común durante el embarazo y, por último, que camines alrededor de treinta minutos o una hora y realices ejercicios de manera regular.

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