¿Por qué salen granos en la espalda?

Índice

• Causas de los granos en la espalda
• 10 consejos para combatir los granos en la espalda

Causas de los granos en la espalda

Los granos en la espalda pueden aparecer tanto en hombres como en mujeres y a cualquier edad, aunque es cierto que es más habitual en etapas de cambios hormonales como la adolescencia o la menopausia.

La piel de la espalda es más gruesa y grasa que la del rostro, por ejemplo, por lo que es más sencillo que los poros se obstruyan a causa de un exceso de grasa o células muertas, lo que hace que se infecten y salgan esos antiestéticos y odiados granos

. Además, existe una bacteria que se encuentra en la microbiota habitual de la piel (el conjunto de microorganismos que habitan en la piel), llamada Propionibacterium acnes, que tiene diferentes cepas que pueden volverse agresivas, causando estos granos en algunas personas.

Además, existen otros factores que aumentan la posibilidad de tener estos granos:

- Producción excesiva de sebo por parte de las glándulas sebáceas, que pueden ser más activas en la espalda en algunas personas.

- Cambios hormonales como los que ocurren en la adolescencia, el embarazo o la menopausia.

- Predisposición genética, es decir, antecedentes familiares.

- Acumulación de células muertas que obstruyen los poros.

- Estrés.

- Dieta inadecuada rica en grasas trans y azúcares, que desequilibran los niveles de glucosa en la sangre haciendo que se acumulen en forma de grasas que obstruyen los poros.

- Abuso de suplementos dietéticos con testosterona que provocan un desequilibrio hormonal.

- Mala higiene.

- Exceso de sudoración, que obstruye los poros de la piel.

- Ingesta de algunos fármacos que pueden producir acné como los antiepilépticos, los corticoides o los ansiolíticos.

10 consejos para combatir los granos en la espalda

1. Mantén una higiene de la espalda adecuada. Cuando te duches, usa un cepillo de cerdas suaves para no dañar la piel y un gel o jabón de pH neutro.

2. Exfolia tu piel una vez a la semana o cada 15 días para eliminar las células muertas y evitar que estas obstruyan los poros. Puedes usar un guante de crin o exfoliantes químicos.

3. No uses ropa muy ajustada y de prendas que no transpiren ya que la acumulación de sudor también aumenta el riesgo de obstrucción de los poros. Elige prendas holgadas de fibras naturales y, después de hacer ejercicio o sudar mucho, cámbiate en cuanto puedas.

4. Sigue una dieta saludable y equilibrada rica en alimentos frescos y naturales como las frutas y las verduras, evitando y/o reduciendo las grasas trans y los azúcares.

5. Bebe al menos 2 litros de agua al día para mantener tu piel hidratada por dentro y por fuera.

6. Evita la exposición excesiva al sol ya que puede empeorar el acné y causarte quemaduras y cicatrices en los granitos que haya. Usa siempre un buen protector solar con un factor de protección solar adecuado y no pases demasiado tiempo al sol.

7. No te explotes los granitos, por muchas ganas que tengas y mucho gusto que dé, ya que puede infectarse la zona y causar cicatrices.

8. Si tienes la piel muy grasa, usa hidratantes y cremas no comedogénicas.

9. El aceite de árbol del té o la miel pueden ayudarte a reducir la infección y el acné. Aplícalos sobre los granos y déjalos actuar unos minutos. El aceite de árbol de té debe aplicarse diluido.

10. Si los granos no desaparecen y son muy grandes o abundantes, consulta a un profesional de dermatología por si necesitas un tratamiento farmacológico para acabar con los granos en la espalda. Los tratamientos tópicos más habituales para tratar el acné combaten las causas principales (exceso de grasa, hiperqueratosis, infecciones) mediante una serie de ingredientes como retinol, ácido salicílico, ácido azeláico, óxido nítrico, dapsona… Estas cremas no pueden usarse en el embarazo, así que cuidado. En caso de acné grave puede recurrirse también a los medicamentos orales como los antibióticos si hay infección, retinoides, anticonceptivos, en caso de problemas hormonales y probióticos para equilibrar la microbiota de la piel.