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¿Cómo saber si bailo bien?

¿Cómo saber si bailo bien?

Es escuchar música y ponerte a bailar como una loca, pero ¿bailas realmente bien? Ni de pequeña ibas a las clases que se daban en el cole ni ahora que eres una mujer adulta vas a ninguna academia, por eso es normal que te preguntes si bailas bien o no.

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Los beneficios de bailar

Tus amigas lo hacen muy bien, o al menos eso es lo que piensas cuando sales con ellas a bailar un rato durante el fin de semana. A todas os encanta bailar y no hay mejor forma de despejar la mente de todo a lo que nos hemos enfrentado durante la semana que bailando, ¿verdad? Pero seguramente no todas bailáis al ritmo de la música…

El baile es el movimiento del cuerpo y las extremidades con ritmo siguiendo el compás de alguna pieza musical, pero este no debe confundirse con la danza, pues, aunque son términos similares que utilizamos para referirnos al arte que expresamos mediante movimientos corporales, la danza es la secuencia de movimientos del cuerpo que sigue unos patrones específicos determinados. Además, la danza es intencionalmente rítmica y siempre involucra valor estético. Requiere de estudios, dedicación, ensayos y prácticas, y es mucho más estricta y estructurada que el baile.

El baile, por su parte, consiste más bien en llevar movimientos con cierto compás. En él usamos ciertas partes del cuerpo como las piernas, los brazos y los pies. Suele ser más libre, pues no existen coreografías estrictas que seguir ya que, de hecho, quien baila suele tener libertad de movimiento. También el baile suele tener fines de entretenimiento y lúdicos, no requiere de un tratamiento técnico y prevalece la espontaneidad sobre la rigidez. Sin embargo, la danza involucra una coreografía la mayor parte del tiempo y conlleva un alto grado de organización.

En el desarrollo humano de las personas, el baile es una parte muy importante por lo que una frase tan célebre como la de la escritora austríaca Vicki Baum llevaba toda la razón: “Hay atajos para la felicidad y el baile es uno de ellos”. De hecho, sí que hace mucho bien, pues resulta que el baile aporta numerosos beneficios a nuestra salud que probablemente desconocemos.

Además de que ayuda a evadirnos de los problemas, pues hace que nos relajemos e incluso ayuda a mejorar nuestra memoria y concentración, el baile también nos ayuda a tonificar nuestros músculos puesto que tenemos la posibilidad de trabajar de forma específica diferentes zonas del cuerpo, siendo a su vez un buen aliado en la pérdida de peso si es lo que uno necesita. Elimina el estrés, ayuda a prevenir la depresión y, no suficiente con ello, también hace que se incremente nuestro nivel de endorfinas, conocidas como las hormonas de la felicidad, que mejoran nuestro estado de ánimo permitiéndonos establecer relaciones interpersonales y haciendo nuevas amistades. Y sí, seremos más felices.

De hecho, según un estudio llevado a cabo por Anna Dubert, “las personas que bailan son más felices”. Según ella misma señalaba, la danza es una actividad a la que es fácil sumarse, y también una experiencia positiva para sus participantes. El estudio realizado consistió básicamente en analizar a 112 adolescentes del sexo femenino que tenían alguna molestia típica de dolor físico o emocional. De las 112 participantes, la mitad debía asistir a clases de baile cada semana, pero el otro grupo a ninguna. El resultado fue el siguiente: quienes comenzaron a bailar, mejoraron su salud mental y disminuyeron los malestares físicos que tenían, además de que se sentían más felices. En la otra mitad no hubo cambios.

Además, según otra investigación, esta vez londinense, “bailar provoca mayor felicidad que correr o ir al gimnasio”. Aquí los investigadores seleccionaron a pacientes con trastornos de ansiedad a quienes dividieron en cuatro grupos para que realizaran ejercicios terapéuticos: una clase de ejercicio, una clase de danza moderna, una de matemáticas y una de música. Los resultados demostraron que el baile logró disminuir de forma significativa los niveles de ansiedad en sí mismo, estimulaba la mente y agudizaba las habilidades cognitivas en todas las edades.

Pero ¿qué se debe hacer para bailar bien?

1. Aprende y practica. La única manera de conseguir bailar bien es practicando día tras día, y si además es nuestro sueño, con mayor motivo. Una práctica constante hace que se perfeccione la técnica siempre y, por supuesto, para practicar cada vez mejor, nunca hay que dejar de aprender.

2. Domina el tiempo al bailar. Es decir, sigue la música. Cada paso debe hacerse al ritmo de la música, y no el bailarín o bailarina, por un lado, y la música, por otro. Para conseguirlo es fundamental, por tanto, escucharla, seguirla y, sobre todo, sentirla.

3. Confía. La confianza es la esperanza firme que una persona tiene en que algo suceda. En casi todos los aspectos de la vida este término es fundamental, pero mucho más en el baile. Tener confianza mientras uno está bailando es imprescindible ya que tenerla será parte del éxito obtenido.

Pero recuerda que, si no practicas para dominar el tiempo al bailar, jamás podrás adquirir la confianza necesaria para dominar un baile o defenderte en una pista de baile.

Y si todavía sigues dudando de si bailas bien o no, tranquila porque, tal y como dijo Dave Barry, “A nadie le importa si no puedes bailar bien. Levántate y baila”. Marta Graham.

Fuente:

“Influencia del baile recreativo en el estado de ánimo y autoestima de personas adultas”. http://pepsic.bvsalud.org/pdf/eureka/v8n2/a09.pdf

Redacción: Ana Ruiz

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