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¿Cómo tratar la sinusitis?

¿Cómo tratar la sinusitis?

La sinusitis es la inflamación de los senos nasales, es decir, de las cavidades que se encuentran detrás de la nariz. Esta enfermedad puede estar causada por infecciones, alergia, inhalación de sustancias contaminantes, defectos en el tabique nasal, etc. Aunque tendrás que ir al médico para averiguar la causa y el tratamiento más adecuado, también puedes recurrir a remedios naturales para aliviar las molestias que causa esta inflamación.

Índice

Síntomas de la sinusitis

Los senos nasales o senos paranasales son un conjunto de cavidades aéreas que se encuentran detrás de la nariz y comunican con las fosas nasales. Estas cavidades son estructuras que influyen en la respiración, la fonación, el calentamiento y la olfacción adecuados.

Cuando estos senos se inflaman por diversas causas, se produce una sinusitis, cuyos síntomas principales son secreción constante de la nariz, sangrado nasal, cefalea, fiebre, mal aliento, nariz enrojecida, cansancio, sensación de rosto inflamado, ojos llorosos, dolor en los dientes, malestar general, tos, falta de olfato, dolor al masticar y afonía.

La sinusitis puede ser aguda (si dura menos de 4 semanas) o crónica (si dura más de 12 semanas), aunque incluso la sinusitis aguda puede durar meses si no se trata adecuadamente o no sabemos identificar lo que nos está pasando.

La principal causa de la aparición de la sinusitis es una infección previa causada por diversos microorganismos, como un resfriado mal curado o una gripe. Las personas con asma y alergias también son propensas a desarrollar sinusitis.

No obstante, puede haber muchas otras causas que provoquen la aparición de esta enfermedad, como la inhalación de sustancias contaminantes (polución tabaco, gases…), una mala higiene bucal, hipoglucemia, cambios bruscos de presión (como los que se producen al viajar en avión o bucear), introducirse algún objeto en la nariz, defectos del tabique nasal o enfermedades que afectan a la motilidad de los cilios nasales (como la fibrosis quística).

Para el diagnóstico de la sinusitis muchas veces basta con la exploración física y el historial médico, pero en ocasiones se pueden hacer diversas pruebas de medicina para confirmar, como una endoscopia nasal, una tomografía computarizada, cultivos de la nariz o pruebas de alergia si se sospecha que la causa pueda ser una alergia. 

Tratamiento farmacológico de la sinusitis

Muchas veces la sinusitis se cura sola o desaparece al hacerlo la causa que la provocó. No obstante, en ocasiones puede volverse crónica o una molestia duradera, por lo que debes acudir al médico para que determine la causa y, según eso, elija el tratamiento más adecuado.

Por lo general, la sinusitis aguda provocada por una infección viral se cura en 7 a 14 días y no se prescribe ningún tratamiento ya que, cuando la infección desaparezca, lo hará la sinusitis.

Si tienes mucosidad de color amarillo oscuro o verde con mal olor o sabor puede ser un signo de una infección sinusal bacteriana, en cuyo caso harán falta antibióticos para acabar con la infección. No obstante, ten en cuenta que solo entre el 2 y el 10% de las sinusitis son bacterianas.

Si la causa es una alergia, tendrás que tomar antihistamínicos para que desparezca la sinusitis y el resto de síntomas asociados a la reacción alérgica.

Además, puedes tomar paracetamol para tratar las molestias y dolores derivadas de la inflamación, como el dolor de cabeza o la fiebre.

Los aerosoles nasales pueden aliviar la congestión, pero algunos de ellos, como los anticongestivos, no deben usarse más de 5 días ya que pueden causar un efecto rebote y aumentar el problema. Los descongestionantes están disponibles en forma de líquidos, tabletas y atomizadores nasales con receta médica y de venta libre.

Los corticoides nasales ayudan a prevenir y tratar la inflamación. Entre ellos, se incluyen fluticasona, budesonida, mometasona y beclometasona.

Remedios naturales de la sinusitis

Como hemos visto, la mayoría de las sinusitis están causadas por un virus y, por lo tanto, no se ofrece ningún tratamiento farmacológico determinado, solo esperar a que se curen solas. Por eso, es conveniente que cuentes con unos cuantos remedios naturales para aliviar la congestión nasal y las molestias que causa la inflamación de los senos nasales.

  • Vahos de eucalipto: coloca en una olla grande agua y ponla a hervir. Echa varias hojas de eucalipto y aspira esos vapores cubriéndote la cabeza con una toalla.
  • La malva es una planta antiinflamatoria, puedes hacerte una infusión de flores de malva y beber varias tazas al día.
  • Vapores de manzanilla: diluye unas gotas de aceite esencial de manzanilla en agua hirviendo e inhala esta mezcla. La manzanilla reduce la inflamación y elimina los gérmenes que causan la sinusitis. También puedes usar aceite esencial de pino.
  • El té de genciana aumenta la producción de glóbulos blancos y las defensas y ayuda a prevenir enfermedades relacionadas con el sistema respiratorio.
  • Trata de dormir con la cabeza levantada para que la congestión no te impida descansar y tu organismo pueda recuperarse antes.
  • Bebe mucho líquido, especialmente agua, que te ayudará a mantenerte hidratado y aliviar la congestión. También puedes beber té con limón y miel para aliviar la sinusitis y el resto de síntomas, como la tos.
  • No fumes, el tabaco aumenta la irritación de los revestimientos de los senos paranasales.
  • Para dormir mejor, puedes mantener el ambiente húmedo con humidificadores.
  • Limpia bien tu nariz para evitar que la mucosidad genere bacterias que pueden agravar la inflamación. Puedes usar una jeringuilla o suero nasal de agua de mar.
  • Cataplasma de verbena: realiza una cataplasma con verbena picada y cáscara de huevo. Coloca la mezcla en un paño y póntelo en la zona de la nariz toda la noche.
  • Aplícate una compresa caliente para aliviar la presión y el dolor facial.
Fuente:

DeMuri GP, Wald ER. Sinusitis. In: Bennett JE, Dolin R, Blaser MJ, eds. Mandell, Douglas, and Bennett's Principles and Practice of Infectious Diseases. 9th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2020:chap 62.

Redacción: Irene García

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