No consigo hacer de vientre

Índice

• Causas del estreñimiento
• Consecuencias del estreñimiento
• ¿Qué puedo hacer?

Causas del estreñimiento

Si echas un ojo a los anuncios de la televisión, te darás cuenta de que se ofertan muchos productos para tratar el estreñimiento. Y es que esta enfermedad es muy habitual en nuestra sociedad y son muchas las personas que padecen estreñimiento de forma habitual. Entre las principales causas de este trastorno del aparato digestivo encontramos:

1- Dieta desequilibrada pobre en fibra. Si ingieres muchos alimentos grasos y azúcares, pero poca fibra (presente en las frutas, las verduras, los cereales integrales o las legumbres), tus heces pueden volverse secas y duras, lo que hará que te cueste mucho más expulsarlas. Además, las dietas desequilibradas hacen que la digestión sea más lenta y, por lo tanto, dificultan el tránsito intestinal.

2- Estrés. El estrés, las prisas, comer mal y a diferentes horas hace que nuestro tránsito intestinal se vea afectado y no seamos capaces de ir al baño con regularidad.

3- Vida sedentaria. El ejercicio regular contribuye al movimiento de los alimentos por el intestino, por lo que una vida sedentaria puede hacer que el tránsito intestinal sea más lento y los alimentos tarden más en llegar al intestino grueso.

4- Aguantarse las ganas de ir al baño. Si nos entran ganas de hacer de vientre cuando estamos en la oficina, por ejemplo, y nos aguantamos porque nos da vergüenza hacer caca en el trabajo, es posible que luego nos cueste más hacerlo cuando ya estemos en casa.

5- Las hormonas. Algunas hormonas enlentecen la digestión, lo que puede dificultar hacer de vientre. El aumento de la progesterona y de los estrógenos, por ejemplo, pueden causar estreñimiento en los días previos al periodo y durante este.

6- Beber pocos líquidos. Beber pocos líquidos, sobre todo poca agua, hace que las heces se vuelvan más secas, lo que puede dificultar su evacuación.

7- Ingestión de ciertos medicamentos. Algunos fármacos provocan estreñimiento como efecto secundario: ansiolíticos, antidepresivos, antihipertensivos, morfina, suplementos de calcio y hierro, diuréticos, etc.

8- Otras enfermedades. Muchas veces el estreñimiento es el síntoma de otro problema, como el síndrome de intestino irritable, diabetes, depresión, esclerosis múltiple, etc.

9- Defectos en el funcionamiento del sistema excretor. A veces el sistema excretor puede funcionar de manera deficiente porque el recto no tiene sensibilidad y no genera ganas de hacer caca; el intestino grueso no se contrae correctamente y no ayuda a las heces a avanzar; o porque el ano se contraiga en lugar de dilatarse al evacuar.

Consecuencias del estreñimiento

Todos podemos sufrir un desajuste ocasional que nos haga ir poco al baño, pero si esta situación se convierte en algo crónico es importante encontrar la causa y buscar una solución ya que el estreñimiento crónico puede ser muy perjudicial para la salud y provocar ciertos problemas:

- Hemorroides. Dilataciones de las venas que rodean al ano que aparecen por los esfuerzos al intentar hacer de vientre. Pueden ser internas o externas y causar dolor, sangrado, picor anal.

- Fisura anal. Es una herida que se produce en la piel que rodea al ano debida a los esfuerzos para intentar expulsar las heces.

- Fecaloma. Cuando las heces se acumulan y se compactan, el reflejo evacuatorio es insuficiente y es necesario recurrir a laxantes u otros medios para ablandar ese fecaloma.

- Hernia hiatal. Al hacer un gran esfuerzo para hacer de vientre, se puede producir un desgarro en la membrana muscular y causar una hernia.

- Divertículos. Son pequeñas dilataciones o bolsas en el intestino grueso que causan molestias.

- Megacolon. El intestino grueso se dilata de manera excesiva para poder albergar las heces acumuladas.

- Vólvulo. Es un giro del intestino sobre su propio eje que se produce a causa de un bloqueo intestinal.

¿Qué puedo hacer?

El estreñimiento causa dolor y dificultad para evacuar, sensación de pesadez, dolor abdominal, heces con sangre, gases, etc. Es un problema muy molesto que conviene tratar cuanto antes. Además de hacer cambios en tu dieta y tu estilo de vida para favorecer ir al baño (comer alimentos con mucha fibra, ir al baño de manera regular a la misma hora para crear un hábito, hacer ejercicio, beber mucha agua…), es importante que acudas al profesional de medicina si el problema persiste y estos remedios no funcionan para que averigüe la causa de tu estreñimiento y te indique el tratamiento más adecuado.

Muchas veces son necesarios los laxantes, pero deben usarse de manera puntual, solo si el problema es muy grave, ya que los laxantes provocan una destrucción de la flora y hacen que el intestino y el ano se vuelvan “vagos”, necesitando recurrir siempre a ellos para poder hacer de vientre. También pueden usarse ablandadores de heces. 

Los agentes voluminizadores, tales como el psyllium y metilcelulosa, son laxantes que ayudan a retener agua en las heces y agregarles volumen. El volumen aumentado estimula las contracciones naturales del intestino grueso y, además, las heces más voluminosas son más suaves y más fáciles de pasar. Los agentes voluminizadores actúan lentamente y se toman en pequeñas cantidades al principio. La dosis se incrementa gradualmente hasta que se consigue la regularidad.

Los agentes osmóticos son laxantes que mantienen grandes cantidades de agua en el intestino grueso, haciendo que las heces sean suaves y sueltas. Estos laxantes consisten en sales o azúcares que se absorben de modo deficiente. Algunos contienen magnesio y fosfato, contraindicados para personas con insuficiencia renal.

Los laxantes estimulantes contienen sustancias que estimulan directamente las paredes del intestino grueso (como la senna y el bisacodilo), haciendo que se contraiga. Una vez se toman, provocan una evacuación intestinal de seis a ocho horas después. Algunos están disponibles como supositorios, actuando con más rapidez, en unos 15 a 60 minutos. Los laxantes estimulantes se utilizan mejor durante períodos cortos y siempre bajo supervisión de un profesional de medicina.

Si el problema es del suelo pélvico, puede ser útil la biorretroalimentación para mejorar la defecación. 

También puede ser necesario aplicarse un enema para conseguir evacuar las heces acumuladas. Sin embargo, lo más conveniente es cambiar los hábitos de alimentación y vida para prevenir el estreñimiento y emplear remedios naturales que nos ayudan a hacer de vientre de manera regular. Por ejemplo, consumir alimentos con mucha fibra como la alcachofa, los frutos rojos, las ciruelas o el kiwi. Se recomienda tomar estos alimentos en ayunas para que favorezcan el tránsito intestinal.

Uno de los remedios más eficaces es dejar en remojo unas cinco ciruelas en un vaso de agua durante 12 horas y, a la mañana siguiente, beberse al agua en ayunas y comerse las ciruelas. También se aconseja beber un vaso de agua tibia en ayunas, hacer un zumo con dos manzanas y medio vaso de aceite de oliva y bebérselo antes de irse a la cama. Tomar una infusión de aloe vera, hacer mucho ejercicio y beber mucha agua. Recuerda también ir al baño en cuanto notes ganas y procura sentarte todos los días en el váter un rato a la misma hora (sin forzar) para crear un hábito.

Es importante también hacer ejercicio físico con regularidad y mejorar tu nutrición.