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Cómo se debe nadar en el mar

Cómo se debe nadar en el mar

Nadar en el mar puede ser muy beneficioso y relajante, pero también puede ser muy peligroso si no tenemos cuidado y seguimos una serie de consejos. Aprende cómo se debe nadar en el mar para disfrutar este verano y evitar los peligros.

Índice

¿Cuáles son los peligros del mar?

El mar, aunque hermoso y fascinante, también puede presentar diversos peligros. El principal es el riesgo de ahogamiento ya que las corrientes marinas, las olas grandes y las mareas pueden arrastrar a las personas hacia aguas más profundas y turbulentas, lo que dificulta la capacidad de nadar y regresar a la costa.

En algunas zonas y en ciertos días, las mareas y las corrientes marinas pueden ser muy fuertes y peligrosas en aguas abiertas. Las corrientes de resaca, por ejemplo, son corrientes que fluyen hacia el mar y pueden atrapar a los nadadores, arrastrándolos mar adentro. También pueden existir corrientes submarinas impredecibles que representan peligros para los buceadores. Por eso, antes de nadar en el mar hay que asegurarse de que es seguro.

Y, a pesar de eso, el clima en el mar puede cambiar rápidamente. Las tormentas, los vientos fuertes y las olas grandes pueden generar condiciones peligrosas para los navegantes y bañistas. Hay que estar atento al clima no solo cuando se nada, sino también si se coge algún barco, velero, patinete…

Por último, algunos animales marinos pueden representar un peligro para los humanos. Por ejemplo, las medusas y las anémonas de mar pueden tener tentáculos venenosos que causan dolor e irritación. Además, en ciertas áreas, los tiburones u otros animales marinos depredadores pueden suponer un riesgo para los nadadores y buceadores.

¿Cómo se debe nadar en el mar?

1- Antes de echarte al mar, comprueba qué tipo de bandera hay (en el caso de que en la playa haya servicio de salvamento). Verde significa que el mar está tranquilo y es seguro nadar; amarillo que hay que tener precaución y no alejarse mucho de la orilla; rojo que está prohibido nadar.

2- Haz caso siempre de las indicaciones de los socorristas respecto a dónde nadar y dónde no, zonas a evitar, actividades prohibidas, etc.

3- Si la corriente te arrastra, no te pongas nervioso y mantén la calma. Nada en paralelo a la orilla y, cuando baje la intensidad, ve hacia la orilla. Nunca nades a contracorriente ya que solo conseguirás cansarte.

4- Si estás agotado y no puedes más, grita pidiendo auxilio y mueve los brazos para que alguien pueda ir a socorrerte.

5- Elige una playa segura: asegúrate de nadar en una playa que esté designada como segura y supervisada por socorristas o autoridades marítimas. Estas playas suelen tener banderas de advertencia para indicar las condiciones actuales del mar. Evita las playas aisladas y peligrosas.

6- No nades solo: siempre es mejor nadar en compañía de otras personas. Si surge algún problema, podéis ayudaros mutuamente y buscar ayuda si es necesario. Si no hay socorristas presentes, asegúrate de que alguien en la playa que sepa que te has ido a nadar para que pueda estar pendiente.

7- Conoce tus habilidades: sé honesta contigo misma acerca de tus habilidades de natación. Si no te sientes segura en el agua o no eres una nadadora experimentada, es mejor quedarse en áreas más cercanas a la costa, donde hagas pie y no haya peligro de sentirte arrastrada por la corriente.

8- En el caso de que la temperatura sea baja deberás de usar un neopreno. Lo habitual es que por debajo de los 20º C sea conveniente el uso del neopreno para evitar el riesgo de congelación.

9- Aprende a respirar: es conveniente que sepas respirar a la vez que nadas por ambos lados y que sepas bucear y aguantar la respiración debajo del agua.

10- Elige un punto de referencia mientras nadas: para evitar perderte y perder la orilla de vista, cuando te adentres nadando en el mar elige un punto de referencia grande de forma que sepas hacia dónde nadar de regreso.

Recuerda que la seguridad siempre es lo más importante al nadar en el mar. Mantén la precaución, sé consciente de tus habilidades y respeta el entorno acuático para disfrutar de una experiencia segura y agradable.

Fuente:

Cruz Roja

Redacción: Irene García

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