4 consejos para una escucha activa y generosa
Todos queremos ser escuchados, pero ¿qué tan bien escuchamos? Cultivar el arte de escuchar puede contribuir en gran medida a crear relaciones más profundas y satisfactorias. Aquí hay algunas formas de aumentar la escucha y, por lo tanto, profundizar las conexiones en tus relaciones importantes.
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A todos nos gusta que nos escuchen cuando tenemos un problema, pero, a la hora de escuchar nosotros a los demás, no siempre practicamos una escucha activa y generosa. Es decir, desconectamos, lo que la otra persona enseguida presiente.
Pero, si queremos que nos hagan caso, también debemos hacerlo nosotros. Estas son algunas formas de mejorar nuestra escucha y, así, nuestras relaciones con los demás.
Preocuparse
Si alguien te preguntara si te preocupas por tu pareja y tus amigos, probablemente responderías sin dudarlo: "Sí, por supuesto". Pero esto plantea la pregunta: ¿qué significa realmente preocuparse por alguien?
Es reconfortante tener la autoimagen de ser una persona cariñosa, y tal vez lo somos. Pero el verdadero cuidado es más que una abstracción. Es más que desearle lo mejor a una persona. Requiere una capacidad madura para ir más allá de nosotros mismos y ver la vida de otro aparte de la nuestra. Tienen su propio conjunto de sentimientos, esperanzas y temores. Cuidar significa que estamos preocupados por su crecimiento y su relación con su vida, no solo con la nuestra. Como Milton Mayeroff, profesor de filosofía, escribió en su libro clásico, Sobre el cuidado:
"Para cuidar a otra persona, debo poder entenderlo a él y a su mundo como si estuviera dentro de él... Debo poder estar con él en su mundo para ver desde dentro cómo es la vida para él".
Cuidar no es solo querer que al otro le vaya bien, es preocuparse de verdad por lo que le pasa, lo que siente y lo que necesita. Esta capacidad es el primer paso para escuchar de verdad al otro.
Estar interesado
El cuidado va de la mano con estar interesado en una persona. En lugar de hacer un esfuerzo por resultar interesantes, mantenemos nuestro enfoque en estar interesados en el otro. Por supuesto, la reciprocidad también es importante, y es importante ser escuchado. Pero el interés genuino que se extiende generosamente puede hacer que la bola ruede hacia un intercambio mutuo satisfactorio.
Podemos aprender mucho al estar interesados en las personas. Cada uno de nosotros tiene una gran experiencia, especialmente a medida que envejecemos. Podemos aprender y ser estimulados por la experiencia del otro. Pero es posible que nadie se abra de verdad a ti a menos que le comuniques que estás interesado. Mostrar interés al escuchar de manera abierta y sin juzgar puede ayudar a una persona a sentirse más segura contigo, lo que aumenta la delicada línea de confianza entre los dos.
Conectar con tu cuerpo
Podemos escuchar más profundamente a medida que nos mantenemos conectados a nuestro cuerpo. Cuando las personas comparten sentimientos o experiencias que son importantes para ellos, es importante respirar hondo a la vez como una forma de conectar contigo mismo. Escuchar no solo a tu mente, sino también a tu corazón. Obviamente a veces nos distraeremos, pero seguro que mejoramos nuestra capacidad de escuchar si, a la vez, conectamos con nosotros mismos.
La gente normalmente siente cuando extendemos la escucha sincera. Al sentirse aceptados en lugar de ser juzgados, se sienten más seguros de ser vulnerables con nosotros y compartir lo que hay en su corazón sin ser paralizados por la vergüenza o el miedo.
Los enfoques somáticos a la terapia, como Focusing (un proceso de toma de conciencia y de sanación emocional que trabaja con la experiencia corporalmente sentida), Somatic Experiencing (un enfoque terapéutico basado en la observación de la naturaleza) y Hakomi (Mindfulness aplicado al cambio personal) –muy de moda actualmente-, pueden ayudarnos a aprender a estar más conectados con los sentimientos que viven en nuestro cuerpo. Aprender a ser gentiles y amables con nuestros propios sentimientos crea una plataforma para atender los sentimientos de los demás de manera sensible y sintonizada.
Controla tus reacciones y tu actitud defensiva
Es fácil activarse cuando las personas expresan sus sentimientos. En la medida en que nos sentimos cómodos con nuestras propias emociones, podemos escuchar sin sentirnos abrumados. Las personas generalmente pueden sentir cuándo nos sentimos incómodos con los sentimientos que están compartiendo, especialmente si sus sentimientos son una respuesta a algo que hemos hecho o dicho.
Controlar nuestra actitud defensiva significa notar cuándo nos estamos apagando o volviendo reactivos o defensivos. Ser conscientes de estas reacciones puede permitirnos hacer una pausa, respirar y notar lo que está sucediendo dentro de nosotros. Podríamos darnos cuenta, por ejemplo, de que nos enojamos si nuestra pareja está molesta por nuestra falta de afecto o por llegar tarde. Es posible que sintamos algo de vergüenza por haber roto un acuerdo o por no ser tan cariñosos últimamente.
La vergüenza es a menudo un disparador para atacar o retirarse. En lugar de reaccionar en un modo defensivo de huida, podemos notar la vergüenza que nos provocó. Podemos dar un paso atrás y expresar la vergüenza y responsabilizarnos por nuestras acciones, tal vez diciendo algo como "Puedo notar cómo te sientes. Tienes razón, he estado distante últimamente. Aprecio que me lo hayas dicho. Me siento mal por no haber estado muy presente o receptivo últimamente".
Nuestra escucha no defensiva puede ayudar a nuestra pareja a sentirse respetado, visto y escuchado, que es un paso hacia la reparación de la confianza rota y la reconstrucción de la conexión.
El arte de escuchar implica relacionarse con una persona de una manera auténtica. Significa estar interesado en el crecimiento de una persona y querer apoyar ese crecimiento. Al igual que las plantas necesitan abundante agua y sol para crecer, las personas necesitan el nutriente de nuestra escucha generosa para crecer y prosperar. Así que toma nota y practica estos consejos para mejorar tus relaciones personales y laborales.
Fuente:
PsychCentral.
