¿Qué regalar por la jubilación?
El tiempo pasa demasiado deprisa y ya ha llegado el día en que tu compañera de trabajo más veterana se jubila. Lleva años dejándose la piel en la empresa y ha conocido a cada uno de los trabajadores más o menos jóvenes que han ido entrando en ella a lo largo de los años. El cariño que la tenéis es enorme y es normal que queráis hacerle un buen regalo por su jubilación. Además, seguro que a ella también se le cae alguna que otra lagrimilla, ya lo veréis…
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Actividades de ocio
Ahora va a tener mucho más tiempo libre, claro. Antes echaba muchas horas en el trabajo, también porque su trabajo lo era todo para ella, pero ahora va a estar en casa… o eso se piensa porque lo mejor que puede hacer, en realidad, no es quedarse en casa, sino más bien aprovechar al máximo ese tiempo libre para conocerse a sí misma, pero también para conocer su ciudad y quién sabe si para conocer algo que realmente le gusta y que todavía no tiene ni idea. El turismo a estas edades es genial y sí, suele ser bastante activo, así que si está saludable y en buena forma no debería ni dudarlo. Hay miles y miles de actividades turísticas: las rutas etnológicas, los conciertos, el teatro y otro tipo de visitas culturales están permitidas.
¿Por qué no regalarla una entrada para el concierto de su cantante favorito? Lleváis años oyéndola en la empresa, no para de tararear las canciones de Sergio Dalma, le adora con todo su corazón y se muere de ganas de ir a un concierto suyo. Seguramente no se lo espera en absoluto y le va a encantar. El teatro y la ópera también son algunas de las actividades que suelen comenzar a suscitar interés a medida que vamos envejeciendo, así que probablemente acepte encantada vuestro regalo. Unas entradas para acudir a actividades como estas y con el acompañante que ella quiera también puede ser una gran idea, y si es de las que todavía vive con la misma ilusión que cuando era una niña, trasladarla a su infancia tampoco es mala idea ¿verdad? De hecho, los musicales están muy de moda. ¿Por qué no regalarle una entrada para ir a ver el Rey León o Anastasia El Musical? ¡Seguro le gustará!
Y si el jefe o la jefa también le guarda un cariño especial a esta mujercilla que tanto ha dado en la empresa, probablemente también desee colaborar con vosotros. Contáis con algo más de presupuesto así que regalar un viaje para que desconecte totalmente y vea que hay mucha pero que mucha vida después de la jubilación. Los viajes siempre son buena idea, pero mucho más si te los regalan, claro. Además, será un gran detallazo y no dejará de ir a visitaros cuando vuelva del viaje (si es que le apetece realmente volver y no quedarse allí, claro…). Probablemente sepáis a qué destino lleva años queriendo ir y todavía no ha conseguido comprar los billetes, así que ya sabéis ????
Unas buenas flores
Por último, recordad que si el presupuesto no es muy elevado siempre podréis regalarle otras cosas que no se suban demasiado de precio. Además, ¡lo importante siempre es el detalle! Puede que suene demasiado típico, pero ¡a nadie le amarga un dulce! Y si lo acompañamos con unas flores mucho mejor. No solamente se le pueden regalar flores a las parejas, aunque tengamos esa costumbre. De hecho, hay algunos tipos de flores ideales para regalar a nuestros compañeros de trabajo, ya sean hombres o mujeres. En este caso es una mujer quien se jubila en vuestra empresa, pero es que una flor como el girasol se puede regalar tanto a un hombre como a una mujer, siempre y cuando queráis expresar admiración a esa persona: toda una vida dedicada a ese trabajo y demostrando ser, además, una gran compañera. Los girasoles son un tipo de flor grande, colorida y que llama la atención y mucho, así que recordad que, si regaláis girasoles a vuestra compañera de trabajo, se sentirá orgullosa de ello, pero sobre todo de lo mucho que la admiráis.
Regalos más económicos
Si todavía no tienes mucha confianza con ella, y encima has llegado nueva a la oficina no te preocupes. De hecho, es probable que el presupuesto se te vaya de las manos. Podrás escabullirte un poco y regalar lo que tú consideres oportuno y no hace falta que lo comentes con toda la oficina, sino simplemente tratar de averiguar si hay alguna cosa que le guste más. Si tiene, por ejemplo, intolerancias a algunas comidas y ya lo ha dicho en más de una ocasión delante de ti, no compres dulces o galletas, y opta mejor por los bonos.
Así es, un bono es, probablemente, el regalo más impersonal del mundo (aunque esto depende también de la manera en que lo utilicemos). Por eso, si quieres regalarle algo a tu compañera porque se jubila y no tenéis mucha confianza, ni tampoco tiempo suficiente para ir a por ello, regálale un bono de alguna tienda donde creas que hay cosas que le pueden interesar o intenta averiguar a través de otros compis con los que sí tengas más confianza qué es lo que verdaderamente le gusta o cuál es su tienda preferida.
Trabajar es mucho más que ganar dinero y ser independiente a nivel económico pues el empleo es una forma de desarrollarse como persona y como profesional, pero también el motor para levantarnos cada mañana. Sin embargo, cuando llega el momento de la jubilación, por mucho que se haya tenido una carrera profesional satisfactoria, será fundamental encontrar una alternativa que permita que uno se sienta útil tanto a nivel personal como con respecto a la sociedad y la comunidad.
Además, el paso de la vida laboral a la jubilación puede ser bastante complicado y suele conllevar un tiempo de adaptación. Por eso, es fundamental crear unos nuevos hábitos que nos permitan organizar nuestro día a día y los quehaceres, así que no os olvidéis de tener un buen detalle con ella y que se vaya feliz por lo que deja y también por lo que queda por vivir.
