¿No quieres envejecer? El ejercicio intenso aumentará tu vida hasta 9 años

Índice

• ¿Se puede frenar el envejecimiento?
• Los altos niveles de ejercicio reducen el envejecimiento hasta en 9 años

¿Se puede frenar el envejecimiento?

A nadie le gusta envejecer y, actualmente, que la esperanza de vida está en torno a los 82 años en muchos países, no solo no queremos envejecer, sino que queremos hacerlo de manera que lleguemos a esas edades en las mejores condiciones posibles ya que vivir de verdad implica estar activo y poder llevar a cabo diversas actividades de manera autónoma.

Por eso, son muchos los estudios que se están realizando para ver de qué manera podemos frenar el envejecimiento de las células y alargar nuestra esperanza de vida consiguiendo, además, estar en plena forma con 80 o 90 años.

Hace poco os hablábamos de una investigación de la Universidad Estatal de Iowa, la Universidad Estatal de Carolina del Sur y la Escuela de Medicina de Harvard, que había llegado a la conclusión de que correr sólo 2.5 horas por semana durante 50 años podía aumentar nuestra esperanza de vida en 3 años. Además, a este dato se añadirían 7 horas adicionales de vida por cada hora más que se corriera a la semana.

Los altos niveles de ejercicio reducen el envejecimiento hasta en 9 años

Ahora, un estudio publicado en la revista Preventative Medicine, afirma que los altos niveles de ejercicio constante están asociados con nueve años de reducción del envejecimiento celular. "Solo porque alguien tenga 40 años, no significa que tenga 40 años biológicamente", explica el autor del estudio, Larry Tucker. "Todos conocemos personas que parecen más jóvenes que su edad real. Cuanto más activos físicamente somos, menos envejecimiento biológico tiene lugar en nuestros cuerpos".

Para llegar a esta conclusión, Tucker, un profesor de ciencias físicas en la Universidad Brigham Young, estudió los telómeros, una región específica de las células relacionadas con el envejecimiento. Los telómeros son los extremos de los cromosomas, el final de la cadena de ADN que protegen nuestra información genética. A medida que envejecemos, los telómeros se acortan.

Tucker analizó la longitud de los telómeros en más de 5.800 adultos que participaron en la Encuesta nacional de salud y nutrición del CDC (Centro para el Control y Prevención de las Enfermedades estadounidense), que es una de las pocas fuentes de datos que recopilan el valor de longitud de los telómeros. La encuesta también incluía datos de 62 tipos de actividad física en las que los participantes podían haber tomado parte en el transcurso de un mes.

Así, descubrió que los adultos con altos niveles de actividad física tenían telómeros significativamente más largos que los que son sedentarios, lo que indica una ventaja de nueve años en el envejecimiento biológico. También tenían una ventaja de siete años sobre aquellos que eran moderadamente activos. Para las mujeres, muy activo significaba andar a buen ritmo cinco días a la semana durante al menos 30 minutos, y para los hombres, 40 minutos.

Tucker se sorprendió al saber que no había una diferencia significativa en la longitud de los telómeros entre los que hicieron un ejercicio bajo o moderado y las personas que no hicieron nada de ejercicio.

Aunque ahora se sabe que el ejercicio puede ayudar a preservar los telómeros, aún no se comprende por qué, pero puede estar relacionado con la inflamación y el estrés oxidativo.

"Sabemos que la actividad física regular ayuda a reducir la mortalidad y prolongar la vida, y ahora sabemos que parte de esa ventaja puede deberse a la preservación de los telómeros", dijo Tucker.

Este estudio se basa también en investigaciones previas que asociaron los telómeros más largos con el ejercicio. Por ejemplo, un estudio de 2015 encontró que cuanta más variedad de ejercicio hacía una persona, como caminar, andar en bicicleta o pesas, menor era el riesgo de tener telómeros inusualmente cortos.