¿Cómo ahorrar energía en el hogar?
En estos momentos en los que la energía está más cara que nunca, saber ahorrar en energía en nuestro hogar es fundamental para gastar mucho menos dinero. Te damos unos cuantos consejos para ahorrar energía en casa.
Índice
¿Por qué es importante ahorrar energía?
Estamos tan acostumbrados a enchufar el cargador del móvil o encender la luz que no nos damos cuenta de que, con cada gesto, consumimos energía que se traduce en dinero.
Tanto la electricidad como el gas forman parte de nuestras casas y no somos conscientes de lo mucho que derrochamos en ambos tipos de energía. Y este derroche no solo implica un gasto para nuestros bolsillos, sino que también supone un daño para nuestro medio ambiente ya que ambas energías contaminan.
Por eso, saber cómo ahorrar energía no es bueno solo para nuestra economía, sino también para cuidar nuestro planeta y evitar la contaminación, deforestación, cambio climático…
Aprende cómo ahorrar energía en tu vivienda.
20 consejos para ahorrar energía en casa
1- Aísla bien tu vivienda
Para que nuestro consumo energético sea lo más eficiente posible, es necesario identificar y controlar las fugas de aire que puede haber en ventanas y puertas que provocan que se escape el calor (o el frío en verano). A veces también se producen en los conductos de ventilación y alrededor de los extractores. Una vez identificadas, se deben aislar por medio de burletes, bandas de silicona, etc. Algunos de estos aislamientos los podemos hacer nosotros mismos.
2- Cambia tus bombillas
Cambia todas las bombillas de tu casa por bombillas led o de bajo consumo. Aunque su precio es más elevado, su vida útil también es muy superior, por lo que gastarás mucho menos a la larga y, además, consumen menos energía.
3- No dejes nada enchufado
Todos los aparatos eléctricos que no se estén utilizando deben desenchufarse siempre: el televisor, la radio, el ordenador, el lavavajillas… todo aquello que no debe estar enchufado, como la nevera, debe desenchufarse para consumir menos energía y gastar menos. Recuerda que, en modo standby, continúan consumiendo energía.
Una forma de desconectar estos aparatos de forma más sencilla es usando regletas, así podrás desconectar varios aparatos de usa sola vez. Otra opción son los enchufes inteligentes que conectan y desconectan completamente los aparatos sin desenchufarlos e incluso son programables.
4- Date una ducha rápida
Estarse mucho rato bajo la ducha no solo gasta agua, que también es un bien preciado, sino que hace que consumas mucha más energía (a no ser que te duches con agua helada). Si eres de los que se pasan más de 20 minutos bajo la ducha, coloca un cronometrador para evitar estar más de lo necesario.
5- Apaga las luces
La luz supone el 20% del gasto energético en los hogares y todos estamos mal acostumbrados a dejarlas encendidas cuando salimos de la habitación o encenderlas cuando no hace falta. Apaga las luces al salir y enseña a tus hijos a hacer lo mismo.
6- Lava con agua fría siempre que se pueda
Lavar la ropa en la lavadora a altas temperaturas nos hace gastar mucha energía. Por eso, es mejor que laves en agua fría siempre que sea posible. Actualmente existen muy buenos detergentes que funcionan igual de bien en agua fría. Además, así cuidarás más tu ropa, ya que los tejidos y los colores se estropean más con agua caliente.
7- Baja la temperatura del calentador
Muchos calentadores vienen de fábrica con una temperatura media de 60º C, que es excesiva para el uso humano e incluso perjudicial para las tuberías. Podemos reducirla a 40º C, seguirá calentando igual y gastaremos menos.
8- Contrata una tarifa de energía barata
El monopolio de las eléctricas ya acabó y existen muchas compañías en el mercado con grandes ofertas y descuentos, además de tarifas diferentes según la franja horaria, ya que no todas son igual de caras. Elige bien la que más se adecúa a tus necesidades y consumo para ahorrar.
9- Aprovecha la luz natural
En España hay muchas horas de luz, así que procura hacer la mayoría de actividades que requieren más luz de día para usar solo una pequeña luz cuando llega la noche.
10- Tapa las sartenes y las ollas al cocinar
Gran parte del calor se escapa si no usamos una tapa al cocinar. Si pones una tapa, tardarás menos en cocinar y, por lo tanto, ahorrarás.
11- Aprovecha el calor residual del horno y la vitro
Tanto el horno como la vitrocerámica no pierden el calor de forma inmediata cuando los apagas, por lo que puedes aprovechar ese calor residual para terminar de hacer lo que estás cocinando. Apaga un poco antes de que termine de hacerse para que se termine de cocinar con el calor que mantiene.
12- Cambia tus electrodomésticos y cuídalos bien
Los electrodomésticos viejos consumen mucho más que los nuevos que cuentan con una buena calificación energética y programas de ahorro y bajo consumo. Si puedes, cambia aquellos que más gasten. Además, hay que mantenerlos bien para que pierdan menos energía y duren más. Limpia los filtros, retira el exceso de suciedad y polvo, usa productos adecuados, etc.
13- Plancha de una sola vez
La plancha consume mucha energía, por lo que es conveniente planchar toda la ropa de una sola vez para evitar ponerla cada dos por tres. Además, para que el planchado sea más eficiente puedes empezar por planchar los tejidos que necesiten menos temperatura y continuar con aquellos que necesiten más temperatura.
14- Evita dejar abierta la nevera o el congelador mucho tiempo
Abrir el refrigerador o el congelador durante un buen rato es una mala práctica si hablamos de ahorro energético. Piensa bien lo que necesitas antes de abrirlos.
15- Mantén la temperatura adecuada en tu hogar
Muchas veces tenemos la casa demasiado fría o caliente, haciendo que perdamos dinero y energía. En invierno la calefacción debe estar a unos 22º C y en verano a 24º C.
16- Utiliza apps de consumo energético
Tener una app que te permita controlar tu consumo te ayudará a ahorrar electricidad en tu hogar.
17- Revisa tu caldera
Una costumbre que no solo te permitirá evitar el consumo excesivo de gas natural producido por una mala combustión, sino que también te ahorrará averías y posibles accidentes.
18- No cubras los radiadores
Los cubre-radiadores o cualquier otro elemento que obstaculice la salida de calor (muebles o ropa secándose), hacen que sea necesario poner más rato la calefacción, gastando más energía. Además, es importante purgarlos de vez en cuando.
19- Usa un termostato regulable
Un termostato que te ayude a programar la calefacción por zonas y franjas horarias te permitirá consumir menos.
20- Lavadora y lavavajillas siempre llenos
Ponlos siempre llenos y, si no puedes por algún motivo, elige el programa a media carga para no gastar sin necesidad.