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Una petición cara a cara es 34 veces más efectiva que por email

Una petición cara a cara es 34 veces más efectiva que por email

En este nuevo mundo tecnológico en el que nos movemos, en el que es posible ver a dos personas sentadas en una mesa cenando sin dirigirse la palabra y solo mirando a su móvil, un estudio reciente demuestra que las peticiones o solicitudes echas cara a cara son mucho más efectivas que las hechas por email. Y es, al fin y al cabo, no hay nada como mirar a una persona a los ojos y ponerle cara de pena para conseguir algo.

Índice

Comunicaciones en la era de la tecnología

Actualmente, casi todas las comunicaciones se hacen por email, redes sociales o mensajería instantánea. Aunque tengas a una persona al lado, si quieres pedirle algo, lo haces por alguno de estos medios, sobre todo si quieres llegar a mucha gente ya que, con un solo clic, puedes mandar un mail o mensaje a cientos de personas.

Así lo demuestra una reciente investigación de Mahdi Roghanizad, de la Universidad de Western, publicado recientemente en la revista Journal of Experimental Social Psychology, en la que se he llegado a la conclusión de que las personas tienden a sobreestimar el poder de su capacidad de persuasión a través de la comunicación textual, y subestimar esa misma capacidad a través la comunicación cara a cara.

En el estudio, los 45 participantes tenían que pedir a 10 extraños cada uno que completaran una breve encuesta. Todos los participantes hicieron la solicitud siguiendo el mismo guion. Sin embargo, la mitad de ellos hizo su solicitud por correo electrónico y la otra mitad cara a cara.

Resultados del estudio

Los resultados reflejaron que la gente era mucho más propensa a responder cuando se lo pedían en persona que si lo hacían por correo electrónico.

Asimismo, se les pidió a los participantes que estimaran la tasa de éxito que tendrían en sus solicitudes. Los que lo hacían en persona estimaron que será de 5 de cada 10 personas; mientras que lo hacían por correo pensaron que la media sería de 5,5, es decir, casi igual en ambos casos. Eso refleja que la gente piensa que los correos electrónicos son tan eficaces a la hora de lograr algo de alguien que las solicitudes cara a cara, a pesar de que el estudio muestra que es 34 veces más eficaz hacerlo en persona.

¿Por qué? La gente muestra mucha confianza en sus textos y en la legitimidad que transmiten, sin darse cuenta de que mucha gente no llega a abrir un correo si el destinatario no les ofrece confianza. No eran capaces de ver lo que muchos destinatarios veían: un correo electrónico de poca confianza pidiéndoles que haga clic en enlace era sospechoso.

Sin embargo, en una interacción cara a cara se pueden estudiar las señales no verbales de la otra persona y así darle más o menos valor y confianza.

Por eso, cuando vayas a hacer una petición a alguien (de trabajo o personal), plantéate si no será más eficaz que los hagas en persona.

Fuente:

Mahdi Roghanizad, de la Universidad de Western

Redacción: Irene García

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