Enfermedades de la vulva
La etimología de “vulva” no se conoce con seguridad, aunque lo que sí sabemos es que es una palabra que procede del latín volva y está constituida por el monte de Venus, los labios inferior y superior, y el clítoris. En nuestra anatomía, la vulva es la parte más externa de la vagina, la cual conduce al útero y a la uretra hacia la vejiga.
Índice
- Problemas de la piel debido a alergias
- Vaginitis o vulvovaginitis
- Vulvodinia o dolor vulvar
- Cáncer de vulva
Problemas de la piel debido a alergias
Las enfermedades en la vulva son mucho más comunes de lo que creemos, y no solamente están relacionadas con el contacto sexual, sino que, además, existen otros muchos más motivos que pueden provocar enfermedades vaginales comunes.
Muchas afecciones pueden causar sarpullido, llagas, úlcera, ampollas o bultos en la zona vaginal (vulva, los genitales externos). Una de las causas más comunes de un sarpullido es la irritación de la piel de la zona genital que podría aparecer cuando no se enjuaga bien el jabón de la piel o cuando se utilizan prendas ajustadas o húmedas que rozan la piel. Una llaga, ampolla o bulto en la zona vaginal requieren la visita al médico.
El tratamiento de un problema vaginal depende de la causa del problema, la gravedad de sus síntomas y su estado de salud general.
El liquen escleroso también puede afectar a la piel de cualquier parte del cuerpo, aunque con mayor probabilidad afectará a la vulva, al prepucio del pene o a la piel que hay alrededor del ano. El liquen escleroso es una enfermedad poco frecuente que crea manchas blancas en la piel, la cual se vuelve más delgada de lo normal, una condición que además afecta casi siempre a mujeres que están en la posmenopausia. Esta enfermedad provoca manchas brillantes y lisas en la vulva que pueden crecer y hacer que la piel se desgarre con facilidad, lo que genera moratones de color rojo o púrpura. Otros síntomas son el picor, el malestar, el dolor, el sangrado y las ampollas.
Pero ¿cómo se trata? Pues bien, el médico suele diagnosticar liquen escleroso con un examen visual, y recetar cremas o ungüentos de cortisona que se aplican en la piel varias veces al día.
Vaginitis o vulvovaginitis
La vaginitis, también llamada vulvovaginitis, es una inflamación o infección de la vagina. También puede afectar la vulva, la parte externa de los genitales de la mujer. La vaginitis puede causar picazón, dolor, secreción y olor.
La vaginitis es común, especialmente en las mujeres en edad reproductiva. Por lo general, la vaginitis se produce cuando hay un cambio en el equilibrio de bacterias que normalmente se encuentran en la vagina. Y aunque existen diferentes tipos de vaginitis, la vaginitis bacteriana es la infección vaginal más común en las mujeres entre 15 y 44 años. Ocurre cuando hay un desequilibrio entre las bacterias buenas y malas que normalmente se encuentran en la vagina de una mujer.
Entre las posibles causas de la vaginitis podemos destacar las siguientes:
- Duchas vaginales
- Usar un dispositivo intrauterino
- Tener relaciones sexuales sin protección con una nueva pareja
- Tener muchas parejas sexuales
El tratamiento dependerá de la causa, puede ser necesario un medicamento antibiótico.
Vulvodinia o dolor vulvar
Es un trastorno que ocasiona dolor de la vulva. Esta es la zona exterior de los genitales de una mujer. La vulvodinia o dolor vulvar causa dolor severo, ardor y picazón de la vulva.
Se desconoce la causa exacta de este trastorno, pero diversos investigadores están trabajando para conocer más acerca de esta afección. Entre las causas principales destacamos:
- Irritación o lesión en los nervios de la vulva
- Cambios hormonales
- Reacción exagerada en las células de la vulva a la infección o lesión
- Fibras nerviosas adicionales en la vulva
- Alergias a ciertos químicos
- Factores genéticos que causan sensibilidad o reacción exagerada a la infección o inflamación
Pero lo que sí es importante saber es que las enfermedades de transmisión sexual (ETS) no causan esta afección.
Cáncer de vulva
El cáncer de la vulva es un tipo raro de cáncer. Se forma en los genitales externos de la mujer y crece de forma lenta durante varios años. Primero, las células precancerosas crecen en la piel de la vulva, lo que se denomina neoplasia intraepitelial vulvar (NIV) o displasia, pero no todos los casos de neoplasia intraepitelial vulvar se convierten en cáncer o carcinoma, aunque lo ideal es tratarla a tiempo.
Por norma general, el cáncer de vulva no tiene síntomas al principio, pero a medida que pasa el tiempo estos se van haciendo cada vez más evidentes. Algunos de ellos son:
- Picazón o prurito en la vulva que dura mucho tiempo y no se alivia con antimicóticos (o antifúngicos), sustancia que tiene la capacidad de evitar el crecimiento de algunos tipos de hongos y de provocar incluso su muerte, o cremas con esteroides.
- Zonas de color rosa, rojo, blanco o descoloridas; parches escamosos o similares a las verrugas.
- Parches rojos y dolorosos o una llaga abierta (úlcera).
- Engrosamiento de la piel y dolor, sensibilidad o malestar en la vulva.
- Cambios en la apariencia de un lunar en la vulva (que puede hacerse más grande o cambiar de color o forma).
- Bulto o masa en la vulva que no desaparece.
- Ardor o sensación de hormigueo (empeora al orinar).
Tanto los signos como los síntomas tardíos se producen cuando el cáncer de vulva se agranda o se disemina a otras partes del cuerpo, incluyendo otros órganos, y pueden ser: picazón severa, dolor, gran bulto o masa en la vulva, dolor al orinar o al tener relaciones sexuales, sangrado o flujo inusual, pérdida de líquido a partir del tumor, y uno o más ganglios linfáticos hinchados o duros en la ingle.
Recordemos lo importante que es, por tanto, acudir al ginecólogo o profesional de medicina y realizar las visitas recomendadas, además de cuidarse adecuadamente, mantener una correcta higiene para evitar, en la medida de lo posible, las enfermedades que pongan en peligro nuestra salud y, por supuesto, utilizar el preservativo en cada relación sexual que tengamos para evitar contagios de patógenos como el virus del papiloma humano.
