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Cómo ser infiel y no sentirse culpable

Cómo ser infiel y no sentirse culpable

La culpabilidad es el sentimiento que aparece cuando sabemos que hemos hecho algo mal o hemos herido a alguien. Por lo tanto, si eres infiel a tu pareja y sabes que eso está mal, es inevitable que te sientas culpable.

Índice

¿Por qué aparece la culpa?

La culpabilidad surge ante una falta que hemos cometido (o creemos haber cometido). Es un sentimiento de remordimiento y malestar que nos atormenta frente a la persona a la que hemos fallado. En el caso de la infidelidad, ese sentimiento se experimenta hacia nuestra pareja, a la que le hemos sido infiel con una tercera persona. En este caso, al ser infiel se rompen una serie de promesas implícitas en la mayoría de relaciones, como la de no estar con ninguna otra persona mientras dure la relación, por lo que la culpabilidad surge de haber roto esa promesa y saber que, si se entera nuestra pareja, le dolerá lo que hemos hecho.

Generalmente, la infidelidad surge cuando hay problemas en la pareja. Lo normal en una pareja enamorada y que se lleva bien es que no haya infidelidades, aunque siempre hay personas que afirman estar enamoradas de otra y, aun así, le ponen los cuernos a la primera ocasión. No obstante, esto no es amor de verdad ya que el amor implica respeto hacia la otra persona, y no se respeta para nada a tu pareja si le traicionas con otra (a no ser que sea una relación abierta y esté aprobada esa conducta por todas las partes ya que no eres monógamo).

Por lo tanto, aquellas personas a las que no les importa ser infieles siempre que pueden, no se sentirán culpables cuando cometan una infidelidad y no tendrán ningún tipo de problema. Así que no hace falta que sigan leyendo.

¿Es posible no sentirse culpable?

Pero si tú has sido infiel a tu pareja y te sientas muy culpable, tendrás que plantearte qué quieres hacer: si contárselo, decirle que ha sido un error, pedir su perdón e intentar seguir con la relación; dejarlo con esa persona porque está claro que, si le has puesto los cuernos, algo no va bien e incluso es posible que te hayas enamorado de la otra persona; o tragarte tus remordimientos y continuar como si nada.

La decisión depende de ti, de cómo te sientas, del tipo de relación que tengas con tu pareja, del tiempo que llevéis juntos, de si tenéis hijos o no… No es sencillo tomar una decisión de este tipo ya que, si se lo cuentas, es posible que no te perdone y que la relación termine; o que intente perdonarte pero ya nada vuelva a ser igual. Y si no se le cuentas, tendrás siempre ahí esa culpa y sabrás que le traicionaste, lo que puede ser duro, sobre todo si alguna vez te pregunta si le has sido infiel y tienes que mirarle a la cara y mentirle.

Por lo tanto, no hay ningún remedio mágico para cometer adulterio y no sentirse culpable. La mente no puede borrar lo que hemos hecho y es normal que te sientas mal, especialmente al principio ya que la mente humana tiene una gran capacidad para olvidar hechos y situaciones pasadas, por lo que es probable que dejes de sentirte tan culpable cuando haya pasado mucho tiempo de la infidelidad (siempre que no cometas más después, claro).

Desde luego, lo mejor para no sentirse culpable por una infidelidad es no cometerla. Pero si ya lo has hecho, reflexiona bien ahora antes de actuar y decide qué quieres hacer con tu relación para que, ya que el error ya está ahí y no puedes viajar en el tiempo para borrarlo, al menos te comportes como es debido a partir de ahora y no tengas relaciones sexuales fuera de la pareja.

¿Existe el sincericidio?

Este nuevo término se ha creado combinando dos palabras: sinceridad y suicidio, y hace referencia al hecho de decir la verdad acerca de una infidelidad para dejar de sentirse culpable, sabiendo que descargará su culpa, pero probablemente dañe la relación para siempre. 

La culpa puede hacernos reaccionar de formas muy distintas y es necesario ahondar en lo que queremos hacer y por qué: ¿merece la pena confesar el engaño?, ¿es algo pasajero y no volverá a ocurrir o se va a convertir en algo habitual?, ¿se trata de un síntoma de que algo en la relación no va bien?, ¿hay que decir siempre la verdad? Hay que darse un tiempo de reflexión para poder decidir dónde colocar la culpa y si queremos vivir con ella y seguir con nuestra pareja o confesar la verdad y asumir las consecuencias. Por supuesto, la decisión dependerá de cómo nos sintamos, si ha sido algo pasajero o no, si seguimos queriendo a nuestra pareja... 

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