¿Cómo eliminar las marcas de acné?
Todas hemos tenido acné en algún momento de nuestras vidas (especialmente durante la adolescencia) y todas hemos tenido la necesidad de explotarnos algún granito. Esto ha hecho que la mayoría de nosotras tengamos alguna marca de acné o cicatrices que persisten toda la vida.
Índice
¿Qué es el acné?
El acné es una enfermedad de dermatología común de la piel que provoca espinillas (granos). Las glándulas sebáceas que están debajo de la piel producen una sustancia grasosa llamada sebo. Los poros se conectan a estas glándulas a través de un canal que se llama folículo. Cuando se tapa un folículo, se crea un grano o espinilla al acumularse el sebo por debajo de la piel.
La mayoría de los granos o espinillas aparecen en la cara, el cuello, la espalda, el pecho y en los hombros. Normalmente va asociado a los cambios hormonales, por lo que es más frecuente en la adolescencia o el embarazo, aunque hay mujeres que los siguen teniendo toda la vida, incluso tras la llegada de la menopausia.
No es una enfermedad grave, pero puede dejar cicatrices muy feas, sobre todo si nos tocamos los granos o espinillas y se infectan, dejando una marca que puede quitarse con el paso del tiempo o que puede quedarse toda la vida en los tejidos, notándose incluso más con el paso del tiempo.
Tratamientos para el acné
Para tratar el acné hay muchas cremas y tratamientos. Para eliminar las cicatrices causadas por el mismo, también.
El 95 por ciento de las personas con acné desarrollan hiperpigmentación posterior en el lugar de la espinilla, es decir, una pequeña mancha oscura.
Para tratar estas marcas lo primero es identificar el tipo de cicatrices del acné, puesto que pueden ser de muchas formas, tamaños, e incluso colores. Las más comunes son las cicatrices deprimidas o deshuesadas, que resultan del acné inflamatorio, o acné papulopustular -lesiones que consisten en manchas rojas, espinillas, pápulas y pústulas. Las cicatrices deprimidas se sientan sobre tejido cicatricial rico en colágeno, evitando que la piel repare la cicatriz.
Para acabar con estas marcas se puede usar dos tipos de láser:
- Láser ablativo (resurfacing) que sirve para quitar las capas externas de la piel a través de la quema de tejido cicatricial para permitir que el colágeno dérmico resurja. Esto reduce el nivel de visibilidad de la cicatriz.
- Láseres no ablativos: desencadenan cambios dentro de la dermis sin afectar la epidermis. Al igual que los láseres ablativos, los láseres no ablativos permiten que el colágeno dérmico se junte para reducir la visibilidad de la cicatriz.
Otros tratamientos dermatológicos incluyen peeling químico -aplicación de ácido fuerte- que puede penetrar profundamente en la piel. Esta opción se utiliza para tratar cicatrices de acné leve. Es un exfoliador a lo bestia, por eso solo lo pueden usar expertos. La subcisión y la dermoabrasión implican instrumentos afilados que están destinados a romper el tejido dañado. En la subcisión, los dermatólogos aplican un pequeño bisturí o una aguja al tejido de la cicatriz para ayudar a producir el nuevo colágeno, mientras que la dermoabrasión implica anestesiar la piel para quitar la capa que tiene las cicatrices y permitir que crezca una nueva capa de piel.
La microdermoabrasión es muy parecida a la dermoabrasión, pero en este caso se remueve una menor cantidad de piel. Solo debe usarse en cicatrices pequeñas.
Las inyecciones de esteroides eliminan las cicatrices al sanar las áreas afectadas haciendo que crezca piel nueva. El tratamiento con esteroides es bueno para cicatrices moderadas.
Un caso parecido es el needling (o agujas) en la piel, que también ayuda a que el cuerpo se sane a sí mismo haciendo que crezca piel nueva y mejor.
Las cremas con colágeno promueven la formación de colágeno. Mientras que las inyecciones de sangre y plasma de la propia persona pueden ser una buena alternativa para personas que, por diferentes razones de salud, no puedan someterse a otros tratamientos.
Por último, tenemos la terapia de aumento o relleno facial en la que se usan "rellenos" hechos de colágeno o silicona con el fin de levantar la piel qué se hundió para que llegue al mismo nivel de la piel que no tiene daño o que no tiene acné.
Estos procedimientos dermatológicos, desde los tratamientos con láser hasta las exfoliaciones químicas, pueden ayudar a minimizar la aparición de cicatrices de acné. Las marcas son únicas, por lo que es mejor consultar con un dermatólogo para determinar qué tratamiento funciona mejor cada tipo de cicatrización.
Remedios naturales para eliminar las marcas de acné
Además de los tratamientos estéticos antes indicados, existen algunos remedios naturales que también puedes probar para eliminar las marcas o cicatrices de acné que tengas en el rostro:
1. Bicarbonato de sodio: si la mancha es leve, puedes probar a aplicar una pasta de bicarbonato de sodio, agua y gotas de limón. Aplícala todas las noches sobre las cicatrices, deja actuar unos 20 minutos y retira con agua fría. No lo hagas de día, ya que el limón con los rayos solares puede crearte manchas de pigmentación.
2. Mascarilla de gel de Aloe Vera: el aloe vera sirve para hidratar, reducir la inflamación y reducir la coloración de las manchas causadas por cicatrices de acné. Coge una hoja de aloe vera, ábrela por la mitad y coge el líquido que sale. Aplícalo sobre las cicatrices y deja actuar 30 minutos. Retira con agua tibia.
3. Miel: la miel también sirve para eliminar manchas y cicatrices gracias a sus antioxidantes. Basta con aplicar un poco de miel sobre las cicatrices y dejar actuar 20 minutos. Retira con agua tibia.
Proksch E., Brandner, J.M., Jensen J.M. (2008). "The skin: an indispensable barrier". Exp Dermatol. 17 (12): pp. 1063 - 72.